Miradas Fotográficas Presenta: LUIS LADRÓN DE GUEVARA - Chile.

  

"En su obra instituyó un lenguaje fotográfico propio, que además de cumplir la función explicativa, publicitaria o de registro, abría un insospechado espectro de alcances y vinculaciones entre la industria, la cultura, el arte y la naturaleza."

Luis Ladrón de Guevara nació el 6 de septiembre de 1926 en Vejle (Dinamarca). 

Hijo del pintor chileno y Premio Nacional de Arte, Laureano Guevara, y de la periodista y fotógrafa danesa Else Larsen, se estableció en Chile en 1930. A los 16 años entró a estudiar a la Escuela Nacional de Artes Gráficas, donde se recibió cuatro años después de publicista y grabador fotolitográfico. Entre sus profesores más influyentes, destaca quien fuera su mentor, Antonio Quintana, quien le inculcó la pasión por la fotografía.

En 1945, consiguió su primer trabajo en la IMPRENTA Y LITOGRAFÍA UNIVERSO S.A., como grabador foto-litográfico y diseñador de publicidad, donde aprendió de cerca el funcionamiento de una industria gráfica. En 1948 decidió trabajar en fotografía de forma independiente, instalando  un pequeño laboratorio junto a la Escuela de Bellas Artes, donde su padre era profesor. Sus primeros clientes fueron artistas de diversas disciplinas a quienes retrató junto a sus obras.

Durante la década del cincuenta ingresó a trabajar al departamento de publicidad de Nestlé-Chile y luego asumió la gerencia de publicidad en Shell, donde se hizo cargo del diseño y producción del Boletín Agrícola. Las ofertas de trabajo del sector productivo fueron una motivación para formar la empresa Ladrón de Guevara y Cía. junto al fotógrafo Jack Ceitelis.

En 1960 fue convocado para formar parte de la importante exposición "Rostro de Chile", -junto con Antonio Quintana, Sergio Larraín, Domingo Ulloa y Roberto Montandón, entre otros- para difundir la imagen país en el extranjero.

A comienzos de la década del setenta, Ladrón de Guevara estuvo a cargo de la creación de la imagen corporativa de varias empresas públicas, filiales de Corfo. Esto lo transformó en uno de los artífices de la imagen oficial de la modernización que intentó desarrollar el estado chileno durante las últimas décadas del siglo XX.

En paralelo, desarrolló un trabajo con una mirada autoral, más cercano a la fotografía documental. Durante su vida obtuvo varios premios, siendo uno de los más destacados el Primer Premio Internacional 1998, otorgado por la Industria Sueca de Cámaras Hasselblad, en celebración de sus 50 años de existencia.

  

                                     

Trabajo  a cargo de:

 Laura Jakulis

 Fundadora de Atrapados por la Imagen