Editorial Online y Atrapados por la Imagen, Presentan: "CAMINO ROTO"

 "Cuento inédito, de la escritora Marta Puey"

Nuevo relato de Marta Puey, autora destacada de nuestra comunidad, y escritora  literaria  de Atrapados por la Imagen, espacio dedicado a nuevos artistas.

"Agradecemos a todos por dejar sus comentarios y apreciaciones sobre la obra

¡¡Muchas gracias!! Administración de Atrapados por la Imagen"

¡¡Felicitaciones y éxitos por esta nueva entrega!!

CAMINO ROTO

En la feria de los alrededores de la villa bajo una sombrilla de la que pendían botellas de agua, para que el viento no la volara; de piel oscura, boca grande pintada de rojo brillante, ojos negros, pícaros, redondos y alargados, cuerpo amplio con evocaciones de erotismo gastado, sí, todo a la vez, estaba sentada Margarita; a su lado la que sería su comadre o compañera de viejas rutas pintada como ella la acompañaba. Me detuve ante la manta que contenía quincallas, un par de sandalias con plataforma de corcho, carpetas tejidas al crochet, muñecos power rangers, florero con calcomanía del Diego, aros, pulseras, collares cosas con las que uno se topa en las mudanzas o en los días de lluvia cuando revuelve cajones en busca de fotos, cosas, sí de esas, de las estuvieron en los rincones quietas y a oscuras por años. 

En medio de ese todo observé un collar con varios hilos de pequeñas perlitas, lo tomé en las manos y en tanto lo deslizaba entre los dedos surgió la charla, me dijo que era peruana, que iba y venía…. Terminé comprándole el collar y le dije: por ahí vuelvo y te traigo algo, te lo regalo ¿eh? Con ancha sonrisa de teclado de ochenta y ocho notas contestó: ¡sí, traérmelo o si quieres me das la dirección y voy a buscarlo… me pide la dirección… ¿se la doy?... ¡no!, si me manda a uno y me asalta. Sí eso pensé; pensé que ella era la mala y yo la buena, y seguí rumiando: si no la conozco; y en medio del pensamiento binario sentí que algo tan simple se convertía bazofia. Me vuelven las ganas de charlar con Margarita, y se me van las ganas, y voy y vengo por el camino roto; porque algo se rompió en el camino, ese por donde caminamos la vida. 

Cuando pase la pandemia voy a tomar el 108 que me deja en la 31, y le voy a llevar lo que prometí. 

Marta Puey

Mayo de 2020

Buenos Aires