Fotografías de autor

¡Este espacio ha sido creado para que todos los amantes de las artes visuales y la literatura, puedan compartir sus trabajos e inquietudes! ¡¡Bienvenidos!!

lunes, 15 de septiembre de 2025

©EDITORIAL ATRAPADOS POR LA IMAGEN PRESENTA : "Mario, el viejo" de la escritora: CRISTINA EQUISITO - Buenos Aires - Argentina.

 

Edición: Editorial Atrapados por la Imagen
RL-2022-18030193-APN-DNDA#MJ

REGISTRO DE PROPIEDAD INTELECTUAL



Cuentos y Relatos Presenta a...


CRISTINA EQUISITO


"Artista de Atrapados por la Imagen"


en...


"Mario, el viejo"


- Cuento Inédito -
Ilustración: imagen libre de la Web

Editorial Atrapados por la Imagen, es un espacio dedicado al arte.




Cuento Inspirado en: “ La balada del álamo Carolina” de Haroldo Conti


"Mario, el viejo"

                                             

Creyó por un tiempo, que no iba ser más que eso, hasta que un día se hinchó por dentro y se puso rígido y sentía una gran atracción por trepar en dirección al cielo.

   Mario sintió que ese desánimo que lo acompañaba desde hacía tiempo, era un sentimiento reiterado, triste, desesperanzado; el final del trayecto. El cierre de un viaje inexorable.

   Ese día despertó distinto. Sus mejillas se encendieron y un ímpetu inusitado lo hizo bajar de la cama con rapidez. No dudó. Se bañó y afeitó la barba con entusiasmo. Desayunó  y salió a caminar hacia la plaza. Quiso retomar un andar distinto, de manera diferente. Vinieron a su memoria esos jardines floridos con especies tan distintas de colores exóticos. Se detuvo a contemplar las flores, observar los árboles; siguió caminando y a medida que avanzaba descubrió lugares que no había registrado a pesar de los años vividos allí, en su pueblo natal.

   Pudo percibir el aroma de la naturaleza viva; de la gente. Hasta se atrevió a patear una pelota a un grupo de niños que jugaban. Siguió, se cruzó con algún conocido de antes, recordó momentos vividos en esas calles y en otras.

   Quiso tomar un café en el bar al que había ido durante años cada mañana a juntarse con amigos. En un rato la mesa estaba ocupada por tres más; uno de ellos empezó a recordar los nombres de los que ya no estaban. Mario propuso hablar de los buenos momentos vividos y empezar a celebrar ese  reencuentro. Los convenció más tarde, de salir a caminar y acompañarlos en la visualización de lugares que él acababa de descubrir. Lo hicieron durante largo rato. Contó a sus amigos que ese álamo carolina que había visto crecer a lo largo de los años, y del que tantas veces les había hablado, hoy tenía las hojas más verdes y sus ramas más erguidas. También les dijo que muchas de las preguntas que se hacía a medida que iba envejeciendo encontraron la respuesta en esta caminata. Supo de la ligereza con la que había vivido una vida donde cumplió a rajatabla  los mandatos culturales y sociales. Estudiar, recibirse, casarse, tener hijos, nietos, amigos de pocos encuentros, de historias parecidas, de un recorrido transitado en armonía. Deseos postergados, acuerdos respetados. Un andar prolijo como solía decir en las charlas con el dueño del kiosco de diarios. Que nunca se había detenido a mirar los pájaros ni el brillo intenso de las vías del ferrocarril que pasaba por detrás de la casa, ni otros árboles que  veía desde su ventana

   Pero ese día se despertó distinto. Se pensó para atrás, sin pena, y en medio de aquélla soledad se llenaba de tantas preguntas como de pájaros a la tardecita.

   Igual que el árbol, Mario se conmovió al ver caer las hojas en ese otoño, pero esta mañana, algún rayo de luz de la primavera temprana, invadió la cama y sus arrugas.

                                                                                                 

                                                           

Todos los Derechos de Autor y Propiedad Intelectual, pertenecen a:


©Cristina Equisito

Buenos Aires - Argentina

año 2025

"Mario, el viejo"

Cuento inédito, Edición Atrapados por la Imagen.

Diseño: Laura Jakulis

"Agradecemos a todos nuestros amigos, lectores y seguidores, por sus visitas y valoraciones".


Afectuosamente...


Administración de Atrapados por la Imagen.

 


Licencia Creative Commons
Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 Internacional.

3 comentarios:

  1. Estupendo relato que hace eco con el álamo Carolina de Haroldo Conti. La vida sensible hace lazo con la naturaleza, pero está atravesada por el tiempo. Suceso y acontecimiento, movimiento y fijeza, pérdida de invierno y renovación de primavera, añoranza y reverdecer, pérdida y ganancia propia del crecimiento. El viejo álamo está sólo, aún cerca de un bosque.

    ResponderBorrar
  2. Renovación y descubrimiento en la vejez, Mario se da cuenta de que aún puede experimentar asombro y belleza, incluso en la madurez. Cristina tu cuento es muy hermoso!! ¡¡Gracias por publicarlo en Atrapados por la Imagen, nos sentimos muy honrados!! ¡Miles de besos y abrazos!

    ResponderBorrar
  3. Certera narración que apunta al retazo de vida por vivir, al que le regala un rayo de luz. No es poco.

    ResponderBorrar

deja tu comentario gracias!