Emilio hoy nos trae algo de . . .
Cormac McCarthy, escritor estadounidense (1933-2023)…y el cine que vino después.
Por: Emilio Bertero.
A Cormac McCarthy lo leí por primera vez después de ver la película de los Coen "Sin lugar para los débiles", basada en la novela "No es país para viejos". Y después le leí casi todo, todo me gustó, en particular "La carretera", con la que ganó el Pulitzer en 2006. De entrada resalta en sus textos un estilo de puntuación que hasta puede parecer desprolijo, pero que en definitiva coadyuva a una gran fluidez narrativa, se dice que tuvo mucha influencia de Faulkner y bien puede ser, tuve muchas reminiscencias de Faulkner cuando leí la Trilogía de la Frontera. Polémico en algunas de sus opiniones, expresó por ejemplo que no entendía a Henry James, un rara avis del mundo literario porque le gustó vincularse más con amantes de la ciencia que de la literatura, me ha dejado huella, cada tanto, como solo hago con pocos, saco algo de él de la biblioteca y me leo algunos párrafos al azar.
Con Cormac McCarthy empezó mi afición por la colección de cine. Fue luego de ver "Sin lugar para los débiles" (Joel y Ethan Coen, 2007, con Tommy Lee Jones, Javier Bardem y Josh Brolin) que me dije, “a ver qué otras novelas tiene, a ver cuáles fueron llevadas al cine”, y así me junté con “La carretera” (John Hillcoat, 2009, una muy buena adaptación cinematográfica con Viggo Mortensen), "The Sunset Limited" (Tommy Lee Jones, 2011, un caso típico de “Escenario Único”, de hecho el texto original corresponde a dramaturgia, en el enorme duelo discursivo entre Samuel Jackson y Tommy Lee Jones, se nota el sello McCarthy), "Todos los hermosos caballos" (Billy Bob Thornton, 2000, de la Trilogía de la Frontera, con Matt Damon y Penélope Cruz, una adaptación que en mi opinión no le hizo honor a la novela) y, hasta donde conozco, no proviene de una novela pero Cormac McCarthy es el guionista de “El abogado del crimen” (Riddley Scott 2013, con Michael Fassbender y Cameron Díaz).
Esta experiencia me desató el afán de planear otros proyectos, como yo los llamo, cine agrupado según género (el “Giallo” es uno de los que más me ha interesado), temática (de entre esto último estuve viendo “autismo”, hay un gran universo más allá de Rainman), por actores o actrices, por directores o directoras, ganadoras de festivales, “basadas en obra de…” como lo de McCarthy, etc., historias, anecdotarios, particularidades, un mundo que no tiene fin, por ejemplo, basadas en obras de Shakespeare, supe de casi 400 producciones, desde la primera (“Le duel d'Hamlet”, un corto de 1900) hay muchísimo para contar, en particular de lo que menos ha trascendido, por solo citar algo, doce notables animaciones rusas de principios de los 90.
Ojalá nunca se me pase este entretenimiento porque será garantía de que nunca voy a aburrirme, siempre me surgen nuevos proyectos de la inagotable fuente que es el cine, ahora acabo de terminar todo lo que pude de películas en las que actuó Vanessa Redgrave, es muchísimo y muy interesante lo que ha brotado de esta investigación…Pero bueno, eso ya es parte de una historia para otra oportunidad.
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Emilio vuelve con una nota que se lee con una sonrisa. Nos cuenta cómo llegó a Cormac McCarthy a través del cine y cómo ese descubrimiento le abrió la puerta a un montón de películas, búsquedas y curiosidades. Se nota el entusiasmo en cada línea y te dan ganas de sumarte a sus recorridos. Una lectura fresca, amable y llena de ganas de compartir. Gracias amigo!!
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